RLa industria eléctrica y de servicios públicos afrontará esta coyuntura recurriendo a una amplia gama de tipos de generación energética, desde la nuclear hasta las renovables. También impulsarán el cambio de paradigma de la generación centralizada a la distribuida: recursos energéticos distribuidos en el contexto de una arquitectura de sistemas eléctricos adaptable y resiliente.

RLa tecnología desempeña un papel crucial a la hora de hacer posible que las empresas eléctricas y de servicios públicos ofrezcan una experiencia transformada al cliente, con tecnologías que avanzan rápidamente y que propician una mejor interacción. La introducción de la IA generativa mejorará aún más la interacción continua entre el cliente y la empresa de servicios públicos. Mejorará las características de resiliencia/autorreparación de los sistemas eléctricos gracias a los recursos energéticos distribuidos controlados por la tecnología, monitorizará la generación de energía controlada por el cliente (p. ej., eólica y solar) y el almacenamiento (almacenamiento en baterías), y permitirá a los clientes seleccionar proveedores de generación de energía renovable (en Europa y en Norteamérica en menor medida). Estos son ejemplos de cómo ha ido evolucionando la experiencia del cliente en los últimos 10 o 15 años, y quizá evolucionará aún más rápido en el futuro. 

RHoy en día, la tecnología forma parte integral de los procesos empresariales de las compañías eléctricas, como la experiencia del cliente, la gestión de la cadena de suministro y aprovisionamiento, la gestión de activos del sistema eléctrico, la construcción, la restauración y la resiliencia, el cumplimiento de la normativa NERC-CIP, etc. Aunque la modernización de la nube comenzase de forma significativa en la década de 2020, la transformación y modernización de la nube eran algo relativamente incipiente durante la pandemia de Covid y ahora están irrumpiendo en todos los aspectos del sector.   En la actualidad, una parte considerable de la infraestructura de TI de las empresas de servicios públicos está orientada hacia la modernización en la nube, mientras que la modernización de la tecnología operativa (TO) de las empresas de servicios públicos sigue siendo una tarea pendiente. Fundamentalmente, la última generación de plataformas y aplicaciones en la nube está permitiendo a las empresas de servicios públicos crear datos de mayor calidad, lo que les proporciona capacidades que hasta ahora eran extremadamente difíciles de conseguir. En esta década, las empresas de servicios públicos son ahora capaces de medir lo que necesitan gestionar, ya sean sus procesos, el rendimiento de sus empleados, el rendimiento de sus equipos, etc. Estas importantes tendencias de modernización serán cruciales para ayudar a las empresas de servicios públicos a gestionar su negocio actual a la vez que mejoran su capacidad de invertir en prioridades demostrables para el futuro.